La Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos se celebra del 18 al 25 de enero de 2025 con el lema «¿Crees esto?» (Jn 11, 26). Esta iniciativa ecuménica reúne a cristianos de todo el mundo en oración por la unidad de la Iglesia. El lema proviene del diálogo entre Jesús y Marta sobre la resurrección, invitando a reflexionar sobre la fe compartida.
La importancia de la unión cristiana es un tema central en esta celebración. Los obispos subrayan la necesidad de un «lenguaje común de la fe» para fortalecer la unidad entre las diferentes confesiones cristianas. Este año, la Semana de Oración también conmemora los 1700 años del Concilio de Nicea (325 d.C.), que proclamó el Credo Niceno, un símbolo de la fe común que une a todos los cristianos.

Como reconocía en octubre del año pasado el Papa Francisco, la unidad es una gracia, un don que tiene como protagonista al Espíritu Santo. Por eso, el principal clavo al que sujetar la esperanza en la recuperación de la unidad ha de ser la oración, acompañada de un ejemplar testimonio de vida.
La iglesia cubana, unida a la celebración universal y a la invitación que se convoca desde el Vaticano, estará desarrollando varios encuentros. En las diferentes Diócesis se llevarán a cabo momentos de oración, conciertos e intercambios que posibilitarán fortalecer la unidad y estrechar los lazos que tienen las diferentes confesiones religiosas presentes en la isla.
En la Arquidiócesis de La Habana la apertura será el día 17 a las 5 de la tarde, en la Iglesia Presbiteriana Reformada. El sábado 18 habrá un tiempo de comunión en la Iglesia Bautista William Carey. La comunidad San Egidio ofrecerá un tiempo de oración y servicio el día 22 a las 6 de la tarde. La celebración de clausura en La Habana, será en la Iglesia San Juan de Letrán el día 24 a las 5 pm.

En la Diócesis matancera igual se ha invitado a los laicos a ser parte de los encuentros programados para estos días. Tendrán una celebración de Apertura el sábado 18, 3:00 pm en la Iglesia Episcopal Fieles a Jesús. El miércoles 22, 3:00 pm, habrá una Oración por la Unidad al estilo de Taizé, en la Iglesia Católica La Milagrosa. Y la celebración de cierre está programada para el sábado 25, 3:00 pm en la Catedral Católica San Carlos Borromeo.

En la Diócesis de Pinar del Río, por su parte, harán la apertura en el templo Adventista del Séptimo Día el propio 17 a las 5 pm. La clausura será en la Catedral San Rosendo, en una celebración que han preparado las Hermanas Brigidinas, a la que ha invitado el propio Obispo Monseñor Juan de Dios Hernández Ruiz, con una carta enviada a todos los pastores protestantes de esa ciudad.

La Arquidiócesis de Santiago de Cuba propone en su programa la apertura en la sede del Centro Cristiano Lavastida a las 2 pm el día 17. Habrá un servicio de comedor social en la Iglesia Episcopal Santa María y otro en la Iglesia Adventista del Séptimo Día para el 18. Así, cada día se han anunciado actividades y encuentros, hasta cerrar el día 26 a las 4 pm en la Catedral.

Tradicionalmente, la Semana de oración por la unidad de los cristianos se celebra del 18 al 25 de enero. Estas fechas fueron propuestas en 1908 para cubrir el periodo entre la fiesta de San Pedro y la de San Pablo. Esta elección tiene un significado simbólico. En el hemisferio sur, donde el mes de enero es tiempo de vacaciones de verano, se prefiere adoptar igualmente otra fecha, por ejemplo, en torno a Pentecostés (sugerido por el movimiento Fe y Constitución en 1926) que representa también otra fecha simbólica para la unidad de la Iglesia.
Según publica el sitio ACI Prensa, el jueves 23 de enero, a las 18:00 horas, la diócesis de Roma organizará una vigilia itinerante, involucrando tres lugares de culto distintos: la iglesia Luterana, la iglesia Ortodoxa de San Andrés, y la parroquia de San Camilo de Lelis. Un comunicado difundido por el Vicariato de Roma, expresa que no se trata simplemente de una vigilia de oración, sino “un breve peregrinaje en tres etapas” con meditaciones bíblicas destinadas para los evangélicos, ortodoxos y católicos.

En Roma, la semana culmina con una celebración especial el 25 de enero, coincidiendo con la conversión de San Pablo. Esta fecha es significativa, ya que marca el día en que San Pablo, en su camino a Damasco, experimentó una transformación espiritual que lo llevó a convertirse en uno de los más grandes apóstoles
El mensaje de esta celebración es claro: la unidad cristiana es esencial para la misión de la Iglesia y para responder a la llamada de Cristo de que todos sean uno. A través de la oración y el diálogo, los cristianos buscan fortalecer su compromiso con la unidad y la colaboración ecuménica.