
El próximo año, la Jornada Mundial de la Paz llevará como lema una llamada clara a rechazar la violencia y la guerra, promoviendo una reconciliación basada en “el amor y la justicia”. Así lo anuncia un comunicado del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, que retoma un ideal presente en todo el pontificado del Papa León XIV desde sus comienzos.
Un mensaje constante por la paz
Desde su primera aparición pública en la Logia central de la Basílica de San Pedro el 8 de mayo, la paz ha sido eje fundamental en las palabras y acciones del Papa León XIV. El tema de la Jornada Mundial de la Paz 2026, anunciado el 26 de agosto, reafirma su compromiso de invitar a toda la humanidad a superar la violencia para abrazar una paz verdadera, que no es solo ausencia de conflicto, sino un estilo de vida que renuncia al miedo y al armamento.
La paz que desarma corazones
El silencio de las armas se convierte en símbolo de desarme auténtico, capaz de abrir corazones, generar confianza, empatía y esperanza. Pero más allá de ser una aspiración, esta paz debe vivirse diariamente, rechazando todas las formas de violencia, visibles o estructurales.
Un llamado universal a construir juntos
El Papa dirige su mensaje a todos: creyentes y no creyentes, líderes políticos y ciudadanos, con el deseo profundo de edificar unidos un futuro pacífico inspirado en el Reino de Dios. La invitación “La paz esté con ustedes” retoma el saludo de Cristo resucitado como signo de comunión y esperanza.
Reconocer las heridas para sanar
León XIV recuerda que el mundo atraviesa heridas profundas causadas por conflictos, desigualdades, daños medioambientales y desconexión espiritual. En sus recientes intervenciones, ha subrayado que la reconciliación debe partir de la realidad concreta, reconociendo las diferencias y superando los conflictos a través del diálogo y la construcción de paz desde las comunidades y las instituciones locales.
Instituciones de paz versus preparación para la guerra
Contra la antigua máxima “Si quieres la paz, prepara la guerra”, el Papa propone con decisión: “Si quieres la paz, prepara instituciones de paz”. Esta construcción debe realizarse desde la base, en diálogo con todos, y tiene como condición indispensable el perdón, un mensaje que reiteró el 20 de agosto en una audiencia.
La paz, luz y esperanza para el futuro
La paz es la luz que todos buscan, especialmente los jóvenes, quienes están llamados a construir el futuro. En la Vigilia del Jubileo celebrada en Tor Vergata, León XIV los exhortó a ser “misioneros del Evangelio, testigos de la justicia y la paz”. Les recordó que la amistad sincera es un camino poderoso hacia la paz y los animó con un grito que resonó en la Plaza de San Pedro: “¡Queremos la paz en el mundo!”.
