Por: Jorge Luis Nodal Cordero.- La Santa Iglesia Catedral Purísima Concepción de la Diócesis de Cienfuegos, acogió este martes 29 de abril, en horas de la tarde, una solemne misa por el eterno descanso del Papa Francisco, fallecido el pasado lunes 21 de abril. La ceremonia fue presidida por Monseñor Domingo Oropesa Lorente, obispo diocesano, y concelebrada por un nutrido grupo de sacerdotes que ejercen su labor pastoral en diferentes zonas de la diócesis.
En un ambiente de recogimiento y oración, los fieles se congregaron para rendir homenaje a quien fuera el primer Papa latinoamericano, profundamente querido por el pueblo cubano. Durante la homilía, Monseñor Oropesa, destacó el legado de humildad, cercanía y amor a los más pobres que caracterizó al pontificado de Francisco, así como su constante llamado al diálogo, la paz y la fraternidad universal.
Como signo del respeto y de las relaciones existentes entre la Santa Sede y la nación cubana, participaron también en la eucaristía, autoridades políticas y gubernamentales del territorio. Su presencia fue interpretada como un gesto de reconocimiento al afecto que el Sumo Pontífice siempre manifestó hacia el pueblo cubano, a quien dedicó palabras de esperanza y comprensión en múltiples ocasiones.
Los cantos litúrgicos, interpretados por el coro catedralicio, y el silencio reverente de los presentes, acentuaron la solemnidad de la celebración, en la que se elevaron plegarias por el alma del Santo Padre, por la Iglesia universal y por el futuro del país. La comunidad católica de Cienfuegos, unida en la fe y la gratitud, despidió así a un pastor que supo mirar con ternura al pueblo cubano, acompañarlo en su dolor y alentar siempre la esperanza.
Fotos: Nelda Ortega Rumbaut.