Este martes, 26 de diciembre, el Papa Francisco salió nuevamente al balcón del Palacio Apostólico en la Plaza de San Pedro del Vaticano, en Roma, a las 12:00 horas, para rezar el Ángelus frente a todos los fieles que asistan a la ceremonia. Además, el rezo fue transmitido al resto del mundo a través del canal de YouTube del Vaticano, ‘Vatican News’. Aunque esta oración se reza todos los domingos, se incluye especialmente en el calendario navideño del pontífice.
El Ángelus es una oración religiosa que recuerda la Anunciación y la Encarnación del Verbo, compuesta por tres textos que revelan este misterio. Estos pasajes se rezan de forma alternada con un versículo y una respuesta, y entre cada uno se recita el avemaría.
En esta ocasión en sus palabras antes del Ángelus, el Papa reflexionó sobre el martirio de Esteban, de quien celebramos cada 26 de diciembre la memoria litúrgica, y recuerda a los hombres y mujeres perseguidos y asesinados, a causa de su fe, de su voluntad de hacer conocer el don de la salvación y del perdón del cual son testimonios, como lo hizo Jesús, y como lo imitó el primer mártir de la historia, cuando ya moribundo, rezó por sus asesinos.
En efecto, aunque a primera vista Esteban parece sufrir impotente la violencia, en realidad, como hombre verdaderamente libre, sigue amando incluso a sus asesinos y ofrece su vida por ellos, como Jesús en la cruz, para que se arrepientan y, perdonados, reciban la vida eterna.
Según el sitio web del Vaticano, la oración del Ángelus se traslada del lunes 25 al martes 26 de diciembre para no coincidir con la Bendición Urbi et Orbi, que se celebra cada año el 25 de diciembre a las 12:00 horas en Roma. Este año, al caer Navidad en lunes, el cambio es necesario.
El Ángelus se reza tres veces al día: a las 06:00, a las 12:00 y a las 18:00 horas. Esta práctica se atribuye al rey francés Luis XI, quien estableció esta costumbre en 1472. Anteriormente, solo se rezaba una vez al día y se anunciaba con algunas campanadas.