Por: Manuel Marrero Ávila

Diócesis de Matanzas, 4 de noviembre de 2014 / La noche del 4 de noviembre, en la Iglesia Nuestra Señora del Carmen, en la ciudad de Matanzas, celebraron los hijos de la tierra yumurina una Misa de acción de gracias por su Santo Patrono San Carlos Borromeo. Dicha Eucaristía estuvo presidida por el obispo diocesano, Mons. Manuel de Céspedes. Estuvieron presentes varios sacerdotes de la diócesis, un diácono, religiosas y fieles laicos de las parroquias de la ciudad, quienes con su Obispo recordaron momentos importantes de la vida de San Carlos, y en especial su devoción a la Eucaristía, la Cruz y la Palabra de Dios, de donde siempre provenía la gracia que le permitió ascender a los altares y ser luz para muchos cristianos que como él, en estos siglos, intentan seguir de cerca a su Señor.

Monseñor Manuel recordó, en la homilía, que San Carlos fue un hombre que apostó por renovar su vida a la luz de la Gracia,más que un renovador de estructuras eclesiales caducas que nada aportaban a la vivencia de la fe en su época, y consciente de que sin una conversión personal auténtica y sin el necesario vuelco del corazón hacia Jesús, los otros cambios quedarían vacíos, visualizados en simples correcciones estructurales.Asimismo, el obispo recalcó que eso es precisamente lo que nos propone el nuevo Plan de Pastoral de la Iglesia en Cuba, que ahora comenzamos a conocer y aplicar en nuestra diócesis, pleno de ese espíritu de conversión y búsqueda de lo sagrado que colmó la vida de San Carlos como Obispo de Milán.

 

Actualizado ( Viernes, 07 de Noviembre de 2014 17:20 )