Nosotros Hoy

Servicio de Noticias de la Iglesia Católica en Cuba

Acción de gracias a Dios por la vida de los padres Bayona y Antón

por Comunicación Parroquia de Aguada

Diócesis de Cienfuegos, Aguada de Pasajeros, 1 de agosto de 2020: Una Misa por el descanso eterno de los PP. Juan Bayona Campos y Luis Antón Temiño, ambos pertenecientes al IEME (Instituto Español de Misiones Extranjeras), tuvo lugar el lunes 27 de julio, a las 7:30 de la tarde, en la parroquia de Aguada.

El P. Juan Bayona falleció en la madrugada del 28 de marzo último, en la Residencia Sacerdotal de Segovia, su diócesis, donde había pasado los últimos años. El P. Luis falleció el día anterior, en Madrid, en la Residencia de las Hermanitas de los Pobres.

La Eucaristía fue presidida por monseñor Domingo Oropesa Lorente, obispo de Cienfuegos, y concelebró el P. Tarsicio, párroco en Aguada. Hubo un buen grupo de fieles que quiso agradecer a Dios por la presencia de estos misioneros fallecidos y por su servicio en dicha parroquia (Bayona de 2005-2010 y Antón 2010-2011).

Cantó un pequeño coro dirigido por Aníbal, que le dio realce. En la comunión entonaron: “Qué detalle, Señor, has tenido conmigo…” un canto que gustaba mucho al P. Juan.

Mons. Domingo hizo alusión al encuentro con ellos y a un par de visitas que pudo hacer al P. Juan en España. Y a su presencia atenta y generosa en la parroquia de Aguada. También motivó a la comunidad a orar por las vocaciones.

Del P. Juan ha quedado su bondad grande, su cercanía, su sonrisa siempre. El P. Luis sólo estuvo un año, vino a sustituir a Juan, pues el plan era que regresara después de un curso de actualización. Pero el diagnóstico de Parkinson le impidió volver. El P. Luis vino ya con 77 años. Había pasado toda su vida misionera (48 años) en Zimbabwe.

En la ocasión también recordaron al P. Agustín Toranzo, quien había trabajado en esta diócesis y fallecido la semana anterior.

El Dios de la misericordia ya los habrá recibido en su Casa e invitado a participar en el gozo de su Señor. Nos queda su entrega generosa, su paso humilde entre nosotros y la alegría de su fe. ¡GRACIAS SEAN DADAS A DIOS!

© 2015 Conferencia de Obispos Católicos de Cuba. Todos los derechos reservados